El lápiz mágico

Si yo tuviera un elemento mágico sería…

Una vez, fui al bosque a acampar con mi familia. Yo, mi hermano y mi hermana estábamos jugando a la mancha corriendo yo me tropecé con algo, era una caja. La abrí y adentro tenía un lápiz. A la noche, cuando todos dormían, en una hoja dibujé un pibe con palitos de 5 cm y se transformó en un pibe de verdad. Empezó a correr por la carpa, lo atrapé y lo guardé en la caja de cartón.

Al día siguiente, empecé a dibujar con el lápiz mágico y todo lo que dibujaba se hacía de verdad. Empecé a pensar y me di cuenta de que el lápiz mágico podía ser peligroso porque si caía en manos malas, podría dibujar algo terrible y hacer mucho daño. Entonces dibujé un lanzallamas y lo quemé. Era divertido el lápiz pero pensé que ¡era mejor así!!

Al día siguiente en el bolsillo de mi carpa, encontré la caja del lápiz, la abrí y allí estaba…el lápiz mágico!

Lo tiré al río y me apareció en el bolsillo. Todas las cosas que hacía para deshacerme del lápiz eran inútiles. Siempre volvía. Por eso se me ocurrió una idea, sería mi último intento. Dibujé una máquina del tiempo y regresé el tiempo al rato antes de tropezar con la caja del lápiz. Entonces vi la caja en el piso, la agarré y la tiré al río. Ésta, es la historia del lápiz mágico.

Rodrigo Espinar 6to